Cómo proteger tus datos y privacidad en Internet

El reciente escándalo de la página de citas Ashley Madison ha desencadenado un debate acerca de la privacidad en la red. Hace pocos meses el hacker conocido como The Impact Team sacó a la luz los nombres, mails, teléfonos y transacciones bancarias de 32 millones de adúlteros, usuarios de esta web, que tiene como eslogan “Life is short. Have an affair” – “La vida es corta. Ten una aventura”.

Esto no sería tan grave, ni hubiera tenido tanta repercusión, si la página hubiera sido un portal de citas común como puede ser Meetic, Tinder o Edarling. Pero, resulta que Ashley Madison se basaba precisamente en ocultar la identidad de sus usuarios, ya que la gran mayoría están casados o tienen pareja.

Tras la escabrosa publicación, numerosos expertos han salido a la palestra para dar algunos consejos a la hora de preservar nuestra privacidad en Internet. A continuación, vamos a explicar cómo poner a los hackers las cosas un poquito más difíciles al proteger nuestros datos con algunos sencillos trucos.

Lo primero que debemos tener en cuenta es utilizar un mail exclusivo para las redes sociales o páginas que se quieran mantener ocultas, nunca un mail personal o de trabajo. Si utilizamos nuestro mail propio o laboral en Facebook o Linkedin, corremos el riesgo de ser encontrados muy fácilmente. Además, es importante evitar poner nuestro nombre personal en este mail alternativo que creemos. Así muchos empleados del gobierno de Estados Unidos utilizaron su correo electrónico del trabajo y fueron descubiertos inmediatamente causando un gran escándalo y perjudicando la imagen de los empleados públicos del país.  

En cuanto a las fotografías de perfil, hay que evitar que las que tengamos no se encuentren duplicadas, ya que Google las indexará y serán encontradas fácilmente. Es decir, si tenemos una misma imagen en Facebook y Linkedin, seremos delatados cuando alguien nos busque en el buscador de imágenes de Google. También es importante el tema de las contraseñas, para lo cual se recomienda siempre combinar letras, números y símbolos. Incluso, evitar que sean demasiado cortas.

Por último, si queremos ser todavía más prudentes, también podemos usar un navegador “anónimo” como puede ser Tor o DuckDuckGo. Aun así, todo esto no sería suficiente si buscáramos en una web de citas, y a continuación, utilizáramos Google o el correo de Gmail, porque ya estaríamos dejando huellas en la red y proporcionando nuestra IP. En definitiva, preservar nuestra privacidad es un tema delicado, pero no está de más extremar las precauciones.