¿Se conseguirá retirar el aceite de palma de los grandes supermercados, definitivamente?

Los grandes supermercados están empezando a tomar medidas para sustituir sus productos con aceite de palma y buscar otras alternativas más saludables para sus consumidores. Marcas como Auchan o Eroski han informado que están trabajando para empezar a sustituir esta grasa saturada, tan presente en sus productos de marca blanca, pero perjudicial para el medio ambiente y para la salud.

El supermercado ecológico SuperSano fue el primero en dejar de comprar a sus proveedores productos con aceite de palma. Retirar más de 100 referencias de su oferta no fue un proceso sencillo: “Hemos tenido que reducir nuestro surtido de productos de panadería, pastelería, bollería, galletas, chocolates, cremas para untar, snacks, etc., pero queremos ser coherentes con nuestros principios”, explicó su gerente, Jesús Sánchez.

Desde entonces, la polémica de la periodista Samanta Villar y Hero Baby, ha vuelto a cuestionar la ética de las marcas. Además, provocó que los consumidores se informaran para conocer hasta qué punto es tan perjudicial este aceite, presente en una infinidad de productos; cereales, jabones, pasta de dientes e, incluso, en los productos infantiles y para bebés como potitos o leche infantil.

Los consumidores pueden provocar un cambio en las marcas

En la web Carro de Combate explican que «las empresas cambian continuamente la composición de sus productos y, debido a la controversia, muchas están sustituyendo el aceite de palma por otras alternativas». Con este proyecto buscan investigar el origen de los productos que llegan a nuestras casas y defienden que «consumir es un acto político, ya que con nuestras compras cotidianas estamos apoyando a las empresas que hay detrás».

Esta grasa es casi omnipresente y se utiliza especialmente en productos procesados. En la lista que ha elaborado este colectivo se pueden conocer las marcas y los productos específicos que la contienen. En el año 2014 se consiguió un cambio importante: Hasta entonces los fabricantes podían limitarse a incluir la referencia del aceite de palma como «aceite vegetal». Sin embargo, ahora el etiquetado es más transparente.

SuperSano acaba de ver cómo sus ventas han incrementado un 20% después de retirar los productos con aceite de palma y sustiturlo, en la mayoría de los casos, por aceite de girasol. Auchan, Eroski, Mercadona, Hipercor o Lidl también están empezando a trabajar con sus proveedores para utilizar otras fuentes o se están planteando el cambio. El mensaje de que los consumidores mueven a la acción a las marcas (y a las compañías) está también presente en esta polémica. Según ha declarado DIA: «Si los clientes no quieren estos productos en nuestra oferta comercial, no los tendrán».

Imagen: WWF.