Este año ya se han empezado a ver varios movimientos en relación a la realidad virtual, que se ha convertido en una de las piezas claves y de gran interés tanto para la sociedad como para el marketing digital. En tan poco tiempo, ha logrado escalar numerosas posiciones hasta alcanzar uno de los primeros puestos en las listas de últimas tendencias tecnológicas. Grandes empresas como Google, Microsoft o Facebook ya están apostando por introducir este tipo de servicio.
Conocemos sobre la realidad virtual gracias a los videojuegos. Fue a finales de los 80 y principios de los 90 cuando se dio un gran empujón a esta nueva manera de ver el mundo. Grandes marcas de videjuegos como el Sega VR o el Virtual Boy de Nintendo lograban transportar a sus usuarios al interior de las historias, todo un éxito. Pero fue en el 2000 cuando Google puso el primer grano de arena de los contenidos de realidad virtual a través de su Street View, que permitió a los usuarios a moverse de un lado a otro y de izquierda a derecha con su ratón por las calles de diferentes lugares. Y a partir de aquí, no ha hecho más que avanzar en muchos ámbitos.
Los militares la utilizan para hacer simulaciones de campo de batalla; en la educación se puede emplear para simular actividades o temas relacionados con el espacio; y para la medicina es una técnica muy importante, ya que puede simular cirugías complicadas para estar preparados frente a una situación real.
La realidad virtual, un gran atractivo para las empresas
Ya no solo podemos ver cómo son las cosas sino que además podemos tener la sensación de estar tocándolas e incluso sentirnos parte de ellas. Es por eso por lo que las empresas han visto la realidad virtual como un gran negocio para impulsar y dar a conocer su marca.
Utilizar la realidad virtual, es ofrecer un servicio atractivo y original que no todas las empresas usan. Incluirla en tu negocio implica dar una imagen de modernidad y actualizada a las últimas novedades tecnológicas. Además, implica ir más allá para dar a conocer nuestros productos.
A través de la realidad virtual invitamos al consumidor a vivir experiencias de aquellos productos o servicios que no se pueden probar antes de comprar. Sumergir al usuario en un mundo alternativo, envolviéndolo en la historia y permitiéndole interactuar con el entorno. Es decir, lograr que el consumidor se sienta 100% en otro lugar pudiendo moverse o tomar decisiones a tiempo real. Ya no tendrán que basarse en las opiniones de los otros que previamente han probado el producto o servicio. Cualquier empresa podría utilizar esta tecnología virtual, sin embargo, las áreas que más utilidad le puede dar son las relacionadas con el turismo, industria y emprendimiento social.
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